Aunque hace muchos años que la literatura de los "no muertos" ha dejado de interesarme (exceptuando los relatos de Anne Rice), este trabajo está resultándome tan divertido que estoy tentada de comenzar con la saga Crepúsculo. No obstante, me temo que ya se me ha pasado la edad para que me guste.
Sobre la escena, de momento sólo os muestro algunos de los elementos que voy a utilizar. El diorama va a ser muy pequeño, porque va estar alojado dentro de una caja libro, pero me las he apañado para que quepa todo lo necesario... y más. Cuando esté acabada, ya me diréis.
La maletita en la que he colocado el "kit matavampiros" es de Matilde Mora; el crucifijo es un regalo de Teresa Triviño; la pistola es una pieza de plata antigua con las cachas de nácar; el fanal con murciélagos es una vasito de cristal puesto del revés sobre una base de madera (una estupenda idea que me dio Cristina Crisóstomo); y el conde es una figura de resina adquirida en USA.